Hay pocos platos típicos cordobeses que sean tan reconocibles como las berenjenas fritas con miel de caña. Son una combinación perfecta entre dulce-salado, además de tener una textura crujiente por fuera y tierna por dentro. Es este contraste lo que hace que este plato tradicional se haya convertido en una auténtica seña de identidad de la cocina andalusí. Y si bien es cierto que puede parecer que este plato típico es sencillo, tiene una historia y una forma de preparación que nos habla de una gran riqueza cultural. Hoy te vamos a contar de dónde proviene este plato, cómo se cocina y, sobre todo, dónde puedes comer las mejores berenjenas con miel en Córdoba. ¡Sigue leyendo, porque se te va a abrir el apetito!

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Historia y origen del plato
Las berenjenas fritas tienen un origen que se remonta a siglos atrás, a la clásica cocina andalusí y cuando esta dominaba buena parte del sur de la Península Ibérica. En ese momento histórico, se introdujeron numerosos ingredientes y técnicas culinarias que provenían del mundo árabe y, entre ellas, aparecen las berenjenas. Esta hortaliza provenía de la India y, gracias al mundo islámico, llegó a Europa.
En plena Córdoba califal, las berenjenas no tardaron en integrarse en la dieta popular. Se valoraron rápidamente tanto por su sabor como por su versatilidad, puesto que se podían cocinar asadas, fritas, guisadas… Y no era extraño encontrarlas acompañadas de melazas y mieles, buscando así ese contraste dulce. De ahí justo nos viene esa combinación de berenjena frita con miel de caña, un legado andalusí que, gracias a ese contraste de sabores, ha conseguido mantenerse en auge. Se ha ido adaptando, eso sí, a las nuevas costumbres, pero ha conservado su esencia totalmente intacta. A día de hoy, podemos incluso señalar este aperitivo como uno de los platos más emblemáticos de Córdoba.
Ingredientes clave
Aunque es cierto que la receta de berenjenas con miel es bastante sencilla, su éxito real va a depender de la calidad de los ingredientes y del cuidado que se tenga en su elaboración. Pero los cinco elementos clave para lograr estas berenjenas cordobesas son los siguientes:
- Berenjenas. Son el elemento crucial, y se recomienda usar variedades firmes, con poca semilla y que tengan carne blanca, para que su sabor y su textura se mantengan en buenas condiciones.
- Harina de trigo. Es el ingrediente que se usará para rebozar todas las rodajas de berenjena, o los bastones, en función de cómo lo cortes. Hay recetas que mezclan esta harina con maicena o con un toque de sémola, para así conseguir que la textura sea más crujiente.
- Aceite de oliva virgen extra, fundamental a la hora de freír. Además, aporta ese sabor tan característico. Se debe freír en aceite abundante y, además, lo ideal es que esté bien caliente, para que la berenjena no absorba demasiado aceite y cambie su textura.
- Sal. Ayuda a potenciar el sabor y, además, a eliminar ese posible amargor de la berenjena.
- Miel de caña. Recomendamos apostar siempre por la auténtica, esa que es espesa y oscura, que se elabora a partir del jugo de la caña del azúcar. Tiene matices más tostados, complejos, que harán que el sabor sea mucho más intenso.
Hay recetas que añaden un toque de limón, un poco de pimienta o incluso algunas hierbas aromáticas. Pero es cierto que la receta tradicional es mucho más sencilla y simple.
Cómo preparar las auténticas berenjenas con miel de caña
Lo primero que debes saber es que preparar berenjenas fritas con miel no es complicado, sobre todo si se juega con algunos de los trucos que te vamos a enseñar. La clave es conseguir que queden tiernas por dentro, crujientes por fuera y, además, nada aceitosas.
Los ingredientes son, para cuatro personas:
- Dos berenjenas medianas.
- Harina de trigo, alrededor de 100 gramos.
- Sal.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Miel de caña.
- Agua fría.
Una vez los tengas todos listos, los pasos son los siguientes:
- Corta las berenjenas tras haberlas lavado en profundidad. Nosotros recomendamos cortar en bastones, puesto que hace que sean mucho más apetitosas a nivel visual.
- En caso de que quieras rebajar ese amargor, puedes colocar las berenjenas en un colador y espolvorearlas con algo de sal. Si las dejas reposar 30 minutos, soltarán parte del agua y harán que ese sabor baje ligeramente. Tras esto, enjuágalas y sécalas con papel de cocina.
- Llega el momento de rebozar las berenjenas con la harina. Si quieres que la textura sea ligera, puedes preparar una tempura mezclando el harina con agua muy fría. De esta manera, sentirás que el acabado es mucho más suave.
- Una vez rebozadas, toca freír. Coloca aceite de oliva en una sartén y deja que caliente a 180º C. Cuando esté listo, podrás freír las berenjenas. Te recomendamos que lo hagas poco a poco, paso a paso, en tandas pequeñas, asegurándote de que queden todas doradas y crujientes.
- Cuando estén fritas, tendrás que escurrirlas en papel absorbente para eliminar el aceite sobrante.
- Y, por último, ¡toca servir! Es entonces cuando tienes que regarlas con miel de caña al gusto.
Variantes en la cocina moderna
Si bien es cierto que la versión tradicional es la que reina por completo en los bares ahora mismo, son muchos los chefs cordobeses que han innovado y han creado reinterpretaciones modernas. Y hoy te queremos hablar de algunas de las variantes más populares:
- Con miel de romero o con otros siropes automatizados. Los más puristas explican que la miel de caña es insustituible, pero hay cocines atrevidos que han buscado usar otros siropes o mieles, incluso infusionados con hierbas o cítricos.
- Con queso de cabra o yogur. Añade cremosidad, se crean contrastes de sabor y la sensación es la de estar ante un plato gourmet.
- Con especias o semillas, como pimentón, sésamo, comino… ¡Muy internacional y llamativo!
- En tempura de cerveza, sustituyendo el rebozado clásico con una tempura mucho más aireada y ligera.
Te recomendamos probarlas absolutamente todas, porque ese aperitivo es siempre un acierto.
Dónde comer las mejores berenjenas con miel en Córdoba
¿Vas a visitar Córdoba? En ese caso, no puedes irte sin probar este plato típico en alguno de los templos gastronómicos más conocidos de la ciudad. Y estas son tres paradas que van a ser obligatorias en tu visita:
- Restaurante Puerta Sevilla. Se ubica en pleno barrio del Alcázar Viejo, y es un referente para aquellos que buscan cocina cordobesa tradicional. Sus berenjenas son muy famosas por tener una textura perfecta y una presentación cuidada. Además, el entorno acompaña: una casa patio andaluza tradicional.
- Taberna La Viuda. ¿Estás paseando por la judería cordobesa? En ese caso, en esta taberna encontrarás unas berenjenas finas, crujientes y acompañadas de una generosa lluvia de miel de caña.
- Posada del Caballo Andaluz. Por último, las berenjenas fritas de esta posada tradicional son unas de las mejores que vas a encontrar en Córdoba. Un imprescindible que nos habla del vínculo que hay entre la historia de la ciudad y sus platos.