Si hay un momento en el que Córdoba se convierte en la cuna del turismo, transformándose en una postal viva, es durante la primavera. Es el clima perfecto para perderse con paseos eternos por todos los rincones de la ciudad: los naranjos florecen, todos los patios se llenan de color y las calles se llenan de ese aroma tan particular del azahar. Córdoba siempre es una experiencia única, pero en primavera esto va incluso a más. Cultura, tradición, naturaleza y alegría llenan sus callejas, con una inmensa cantidad de eventos que no te querrás perder. ¡Y hoy te los contamos todos!

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Semana Santa
La primavera cordobesa da el pistoletazo de salida con uno de los eventos religiosos y culturales más importantes del año: la Semana Santa. Es una Fiesta de Interés Turístico Nacional, puesto que combina cultura, tradición, arte y belleza en todas y cada una de sus procesiones. Estas pasan por los rincones más emblemáticos de la ciudad, dejando tras de sí postales y fotografías únicas. Se respira ese ambiente tan propio de la festividad, y que a tantos turistas suele atraer.
Desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurección, las callejas del casco histórico de la ciudad se llenan de pasos, tambores, nazarenos y saetas. Decenas de hermandades recorren la ciudad al compás de las bandas (algunas, incluso en silencio) con imágenes de un valor artístico casi incalculable.
Cada una de las procesiones tiene su propio recorrido y significado, pero todas tienen en común una belleza elevada. Además, el paso por carrera oficial de estos pasos es emocionante, puesto que pasan por la Mezquita-Catedral. Con el olor a incienso y la música en vivo, se consigue una atmósfera inalcanzable.
Los Patios de Córdoba
En cuanto se despide abril, Córdoba se viste de flores con su Festival de los Patios. Imaginad la importancia que tiene este que ha sido declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Durante dos semanas de mayo, los vecinos de Córdoba abren las puertas de sus patios para mostrar al mundo todo lo que estos esconden.
Pese a que los podamos describir, nada se compara con la sensación de pasear por ellos. Son un oasis de frescor y belleza, normalmente decorados con mucho más que macetas; fuentes, pozos, suelos de canto rodado, columnas… Son un auténtico espectáculo que rinde homenaje a la época romana y musulmana. Nacieron como una necesidad de combatir el calor y, a día de hoy, es una auténtica expresión cultural.
Hay una inmensa cantidad de patios repartidos por los barrios del conocido Alcázar Viejo: Santa Marina, San Agustín, San Lorenzo, la Judería… E incluso hay otros más modernos a los que también merece la pena echarles un ojo. Lo mejor de todo es dar paseos de uno a otro, sin prisa, descubriendo su historia y sus particularidades. La fotografía y la estampa que dejan cada uno de ellos es insuperable. Y aprovecha el paseo para disfrutar de la gastronomía cordobesa, ¡que tampoco tiene rival!
Mayo festivo: Cruces, patios y feria
Mayo es, sin duda, el mes más festivo de todo el calendario cordobés. Porque antes de que tengan lugar los Patios, de los que ya os hemos hablado, llegan las Cruces de Mayo. Durante el primer fin de semana de este mes, muchas de las plazas y de los rincones de Córdoba se llenan de cruces florales. Se nota el esmero que las peñas y las asociaciones realizan a la hora de decorarlas. Hablamos de cruces de más de tres metros de altura que siempre se acompañan con macetas, mantones, farolillos… Y en las que nunca falta vino, cerveza y una buena cantidad de tapas tradicionales. Porque es un evento cultural, festivo y en el que la gastronomía tiene su cabida.
El ambiente es inmejorable. Durante el día, lo normal es pasear y admirar las distintas cruces, así como escuchar música en directo. Por la tarde, llega el momento clave del jolgorio y la ciudad vibra con las actuaciones.
Tras las cruces, vienen los Patios. Y no creas que aquí acaba el mes, puesto que llega justo entonces el evento grande: la Feria de la Salud. Tiene lugar a orillas del Río Guadalquivir, en el recinto de El Arenal, durante una semana entera. Y es en este momento en el que Córdoba se viste de farolillos.
La feria está llena de casetas, todas ellas de acceso libre, algo muy llamativo y poco habitual en las ferias andaluzas. Es un punto a favor de los turistas, puesto que hace que el ambiente sea mucho más inclusivo y acogedor. En todas las casetas se baila, se come salmorejo, flamenquín y se bebe rebujito, todo al ritmo de rumbas y sevillanas. El ambiente varía mucho en función de si vas por la mañana o por la noche; durante el día, es el momento perfecto para ir con la familia. Porque los niños disfrutan con las atracciones, la comida y el ambiente. Por la noche, todo es mucho más animado y festivo, puesto que la música perdura hasta altas horas de la noche y siempre con ese espíritu de celebración tan contagioso.
Rutas de la Sierra: campos en flor y senderos
Si quieres escapar un poco del bullicio, la primavera es el momento perfecto para disfrutar del paisaje natural de la ciudad. Las rutas que te vamos a mencionar ahora son algunas de las más interesantes, aunque debes saber que hay otras disponibles también:
- Parque de Los Villares. Es uno de los destinos más fáciles desde la propia ciudad, porque encontrarás autobuses que te llevan. Y, además, es un parque bonito, con senderos sencillos de recorrer y muchas zonas de merendero. Un entorno increíble, plagado de encinas, pinos y jaras. Sobre todo, es interesante para familias y para personas que busquen escapar del ambiente de la ciudad. Tiene incluso áreas infantiles, así que la diversión está garantizada.
- Ruta de las Ermitas. Para aquellos que quieran hacer ejercicio y que disfruten paseando al aire libre, la ruta de las Ermitas es una de las mejores. Porque, además, ofrece una de las mejores vistas desde lo alto de la sierra de Córdoba.
- Santa María de Trassierra y todos sus senderos. Está a tan solo quince minutos del núcleo urbano, y es un punto perfecto para explorar todo tipo de rutas. Como, por ejemplo, el Sendero del Arroyo Bejarano, que está plagado de belleza: molinos antiguos, puentes de piedra… Además, en primavera el paraje se cubre de vida y de flores silvestres.
- La Campiña. ¿Has viajado en bicicleta, o quieres hacer rutas ciclistas por Córdoba? En ese caso, debes saber que la Vía Verde de la Campiña es una antigua vía que une Córdoba con el sur de la provincia. Cruzarás algunos de los parajes más bellos de la ciudad, y disfrutarás de un aroma primaveral único.