Córdoba es una ciudad rica en historia y cultura, así como el hogar de una de las tradiciones más coloridas de España: los patios. Son mucho más que un simple espacio al aire libre; son un reflejo del alma y de la identidad de la ciudad. Tanto es así que han sido catalogados como Patrimonio de la Humanidad, por la riqueza cultural que aportan a la ciudad. Hoy vamos a explorar su origen, su evolución a lo largo de los años y, por supuesto, cuáles son los patios que no te debes perder bajo ningún concepto.
La tradición de los patios en Córdoba es una de las más emblemáticas, ¡y una de las más antiguas! Porque se remonta a la época de los antiguos romanos. Fueron estos los que comenzaron a construir viviendas con un diseño arquitectónico concreto: siempre se incluía un patio central. Además, a esto hay que sumarle que los musulmanes que durante la Edad Media ocuparon la península mantuvieron este diseño. No solo eso, sino que también incorporaron nuevos elementos: una fuente central, vegetación, decoración… Y fue así como realmente nacieron los patios que hoy realmente conocemos.
Esta vegetación, tanto las flores como el rento de plantas que decoran actualmente los patios, cuentan con la ventaja de ofrecer un espacio mucho más fresco. En una ciudad tan calurosa como Córdoba, esto es de agradecer.
Con el paso de los años, los patios continuaron siendo un elemento esencial de la arquitectura cordobesa. Y pasaron a ser mucho más que un lugar de ocio, o una expresión artística: ahora mismo, forman parte de la cultura de la ciudad. Tanto es así que las familias comenzaron a competir entre sí para ver quién tenía el mejor patio. Gracias a eso, y a esa tradición de conservación, hoy podemos disfrutar de uno de los eventos más bonitos de Andalucía y de España.
La festividad de los patios es, sin duda, una de las más esperadas de toda la provincia. Durante la primavera, las calles se visten de flores y los patios se engalanan de colores. Son meses de disfrutar de los aromas de las flores, de las tonalidades y de las construcciones que muchas personas realizan con estas plantas. Porque se pueden apreciar auténticas obras de arte.
Los patios se llenan de geranios, claveles, jazmines y todas las plantas aromáticas que pudieras imaginar, haciendo que el aire se llene de sus fragancias. Aunque no es solo un espectáculo visual, sino también cultural, puesto que podrás disfrutar de música, danza y, por supuesto, una gran cantidad de visitas guiadas.
Hay patios que se consideran monumentales, todos los que se encuentran cerca de antiguos palacios o edificios religiosos. Por ejemplo, el Palacio de Viana, que es uno de los más famosos de la ciudad. Y, por otra parte, se encuentran los patios catalogados como de concurso. Los hay más antiguos, que fueron construidos antes de la década de los sesenta, mientras que también hay patios modernos. Aunque hemos de aseverar que todos merecen la pena, ¡y que son una auténtica maravilla!
¿No sabes qué patios debes visitar? ¡No te preocupes, porque nosotros te hacemos una pequeña lista de los que no te puedes perder bajo ningún concepto!
Lo primero que debes saber es que hay ciertas rutas que son especialmente recomendables, como la de los patios de San Basilio. En este barrio tan pintoresco de la ciudad vas a encontrar una gran cantidad de patios diferentes, así que te recomendamos que le dediques una mañana completa. Además, puedes aprovechar para comer por la zona, puesto que hay restaurantes tan afamados como Puerta Sevilla Taberna La Viuda o La Posada del Caballo Andaluz, donde podrás disfrutar de la gastronomía local con la mejor calidad.
Puedes, incluso, pedir una visita guiada y disfrutar al máximo de la experiencia. Los patios de San Basilio están, además, entre los más famosos de la ciudad. La importancia de este barrio es tal que se le conoce como el barrio de los patios cordobeses. E incluso hallarás tiendas de perfumes de alta calidad, como “Esencia de los Patios”, donde podrás comprar el mismísimo aroma de estos patios y llevarlo siempre contigo.
Más allá de este, hay otros patios que debes conocer. Como el patio de los Naranjos, que es uno de los más emblemáticos, puesto que se sitúa en la Mezquita Catedral. O el patio del Convento de Santa Marta, que cuenta con siglos de historia, y es un lugar de paz, serenidad y un silencio sepulcral.
También hay una gran cantidad de patios que han sido galardonados con premios en estos últimos años y, por lo tanto, merecen un espacio especial:
Pese a que la festividad de los patios se suele dar en un momento concreto del año, hay algunos patios que permanecen todos los años abiertos. En la web oficial de Turismo de Córdoba se puede hallar el listado completo, así como la posibilidad de reservar las visitas guiadas. Aunque hoy queremos hablarte en particular de un patio que debes visitar, independientemente del momento del año en el que vengas: el del Palacio de Viana.
En realidad, el Palacio de Viana es una majestuosa construcción que cuenta con un total de doce magníficos patios. Una auténtica maravilla en todos los sentidos, y que se encuentra abierto todo el año para que los visitantes puedan apreciarlo.
Los visitantes podrán pasear cómodamente por todos los patios, así como por algunas de las estancias de su interior, y disfrutar de sus colores, aromas y vida.
Junto a los patios, otro de los grandes eventos de Córdoba es el concurso de rejas y balcones. Los cordobeses se lanzan a adornar sus fachadas, para así conseguir ganar los premios a las mejores decoraciones y diseños. Y es una gozada ver cómo las calles se llenan de colores, y la estética de la ciudad cobra vida.
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